Por: Alejandra Inclán
Tristeza retenida
por un adiós que no se quiere dar.
Por esa sonrisa que no veré
y que tendré que imaginar.
Por lo mucho de mí
que parte contigo,
dejándome un espacio frío.
Porque es injusta la vida
al separarnos así,
sin darnos un momento
más de contemplación.
Porque en la inmensidad
del cielo veo tu rostro,
mientras que bajo el mío y lloro.
Porque te amo,
porque se ha gestado una relación
que en sus 7 meses, me ha dejado dolores de un parto.
Cosas maravillosas y los sin sabores…
Te amo.
No puedo negarlo.
Con mi frágil y adolescente corazón,
te amo.
Vuelve pronto.
Porque el dolor de lo que está naciendo
no es justo que lo pase sola.
Te espero.
No tardes. Inténtalo.
Que los demonios que nos separaron,
no intervengan también en esta relación lejana.
Que en nuestros corazones nunca haya distancias.
Te amo…
¡Genial!
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Gracias por leer
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